Usuarios de redes sociales descubren que el menor simulaba tirar gelatinas para ganar dinero de transeúntes, generando preocupación y debate.
En días recientes, el caso del “niño de las gelatinas” ha generado revuelo en redes sociales, especialmente en TikTok, tras viralizarse varios videos en los que se expone una táctica de engaño en la Ciudad de México. Usuarios han compartido grabaciones donde un menor finge haber tirado gelatinas en la vía pública para que los transeúntes, conmovidos por la escena, le den dinero en efectivo. La situación ha suscitado opiniones diversas, desde quienes denuncian la acción como un fraude hasta aquellos que expresan preocupación por el niño y su situación personal.
Dos de los videos que han captado la atención del público fueron publicados por los usuarios @shanetsanabria192 y @bajito.perfil27, donde muestran al menor rodeado de gelatinas tiradas en el suelo. En uno de estos videos, se puede ver que, a diferencia de ocasiones anteriores, las personas ya no se detienen para ayudarlo ni darle dinero, dejando al niño sentado en el suelo sin recibir atención. Según el video de @shanetsanabria192, los espectadores en TikTok notan que la situación ha cambiado y ya no hay donaciones para el menor tras la exposición de su táctica.
Fraude o situación de necesidad
La reacción en redes sociales ha sido variada. Mientras algunos reprueban la práctica del menor, alegando que constituye una falta de respeto hacia los transeúntes, otros opinan que se trata de un posible caso de necesidad y que debe analizarse el contexto que ha llevado al niño a realizar estas acciones. Algunos usuarios, como los de TikTok, han dejado comentarios sugiriendo que detrás de este comportamiento podría haber vulnerabilidad o falta de apoyo social, y han manifestado su preocupación por las condiciones que enfrenta el menor.
Uno de los comentarios recurrentes en TikTok menciona: “Es lamentable que llegue a hacer esto, pero también da pena pensar en las razones que lo llevaron a esta situación”. Otros, en cambio, han sido críticos con frases como: “Esto es un fraude emocional, engañar de esta forma no es correcto”.
Exposición y consecuencias para el niño
La difusión de estos videos no solo ha cambiado la respuesta de la gente en las calles, sino que ha abierto un debate sobre la exposición de menores en redes sociales y la forma en que el público reacciona a estos casos. Al conocerse la verdad sobre la táctica del niño, las reacciones de los transeúntes han pasado de la ayuda y solidaridad a la indiferencia, según se observa en las imágenes difundidas.
Debate sobre la ayuda y la empatía
El caso del “niño de las gelatinas” evidencia el poder y la influencia de las redes sociales en la forma en que percibimos las historias de vulnerabilidad. Además, plantea cuestionamientos sobre las estrategias de supervivencia que algunos menores de edad utilizan en las calles de la Ciudad de México y abre la conversación sobre la importancia de ofrecer alternativas sociales y educativas para aquellos que se encuentran en situaciones de necesidad.
Esta situación, al volverse viral, ha generado opiniones divididas. La exposición mediática del menor invita a reflexionar sobre cómo la sociedad y las redes reaccionan ante historias de vulnerabilidad y, al mismo tiempo, subraya la necesidad de programas de apoyo que ofrezcan alternativas reales a aquellos que viven en situaciones de carencia o vulnerabilidad.
