El fin de semana, una de las bandas más icónicas del heavy metal, Metallica, dio un concierto en Brasil, sin embargo, no todo salió como esperaban los músicos, ni los miles de fans que abarrotaron el estadio Mineirão de Belo Horizonte, ya que el vocalista del grupo, James Hetfield, se rompió en mitad del recital y no pudo contener el llanto al sentirse inseguro y “viejo”.
Hetfield ha dado conciertos desde hace 41 años, comenzó su carrera en 1981, cuando Metallica dio el salto al panorama musical con éxitos como Nothing else matters o Enter Sandman.
Actualmente, el cantante tiene 58 años, lo que lo llevó a mostrar su parte más sensible ante el público a quienes les explicó que no podía seguir tocando.
“Tengo que contarles, no me sentía muy bien antes de venir aquí. Me sentía inseguro. Sentía que ya estoy viejo, no puedo tocar esta mi#rda nunca más. Eso es lo que me decía en la cabeza”, relató con lágrimas en los ojos.
Finalmente, el líder de Metallica agradeció a sus compañeros por apoyarlo y se fue recuperando de a poco.
“Me abrazaron y me dijeron que si me sentía mal en el escenario, me iban a apoyar. Ahora, viéndolos a todos ustedes aquí, sé que no estoy solo y tampoco ninguno de ustedes”, agredeció.
Hetfield detalló lo que le comentaron sus compañeros al verle deprimido antes de la actuación:
“Si lo pasas mal arriba en el escenario, nosotros te hacemos el aguante. Eso significa el mundo para mí”.
En ese momento, sus compañeros Lars Ulrich, Kirk Hammett y Robert Trujillo salieron a darle un abrazo mientras el vocalista continuaba llorando.
“Eso significa mucho para mí y verlos a ustedes ahí me hace ver que no estoy solo, y ustedes tampoco”, concluyó, y tras los elogios y aplausos del público, tomó el micrófono y continuó con el concierto.