El Partido de la Revolución Democrática (PRD), una de las fuerzas políticas históricas de México, perderá su registro tras no alcanzar el 3% de la votación en las elecciones generales del pasado 2 de junio. Con esta pérdida, el PRD se convierte en el vigésimo sexto partido en perder su registro en los últimos 33 años.
Después de la elección, el PRD ha intentado impugnar algunos resultados para recuperar los votos necesarios. Según su líder nacional, Jesús Zambrano, faltarían unos 200,000 votos para alcanzar el umbral. Zambrano solicitó al Instituto Nacional Electoral (INE) reabrir todos los paquetes electorales de los 300 distritos para las elecciones de senadores, diputados y presidente, pero la propuesta fue rechazada por el INE.
El mismo INE notificó al PRD sobre el inicio de un periodo de prevención, imponiendo restricciones financieras y administrativas. Durante este periodo, el partido deberá cumplir con diversas obligaciones, incluyendo la suspensión de pagos a proveedores y la prohibición de enajenar activos. La Comisión de Fiscalización designará un interventor para el procedimiento de liquidación.
De acuerdo con el artículo 94 de la Ley General de Partidos Políticos, un partido entra en periodo de prevención cuando cumple alguno de los criterios de pérdida de registro. En este caso, el PRD no alcanzó el 3% de la votación. En la elección presidencial obtuvo el 1.86% de los votos, en el Senado el 2.27% y en Diputados el 2.43%.
El 15 de junio, durante una reunión nacional, Zambrano reconoció que “ese PRD que construimos hace 35 años ya no existe más”. Expresó su tristeza por la situación, pero afirmó que es momento de cerrar un ciclo. Además, Zambrano aseguró que buscará conformar un nuevo partido político con un nuevo nombre, dejando atrás las prácticas que llevaron a los actuales resultados del PRD.
No obstante, Zambrano anunció que el PRD dará su última batalla ante el Tribunal Electoral, intentando convencer a los magistrados de que la violencia y el crimen organizado afectaron a sus candidatos y, por ende, su votación. Su objetivo es recuperar 200,000 votos y alcanzar el 3% de la votación.
El PRD, fundado el 5 de mayo de 1989, surgió como un proyecto alternativo de izquierda en un país dominado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI). A lo largo de su historia, el PRD fue una fuerza significativa en la política mexicana, alcanzando su auge en los años 90 y principios de los 2000.
Sin embargo, el declive del partido se hizo evidente tras la salida de Andrés Manuel López Obrador en 2012 y la formación de MORENA en 2014. Desde entonces, el PRD ha enfrentado numerosas dificultades, incluyendo la necesidad de aliarse con otros partidos para mantenerse relevante en la política mexicana.