El INVI anunció que los inmuebles formarán parte del Programa de Vivienda Pública en Renta, con tarifas accesibles que se definirán en las próximas semanas.
El Secretario de Vivienda y Director General del Instituto de Vivienda (INVI) de la Ciudad de México, Inti Muñoz, informó que más de 500 departamentos construidos como parte del plan de redensificación posterior al sismo de 2017 serán puestos en renta luego de no haberse vendido en las subastas originales.
Tras el devastador sismo del 19 de septiembre de 2017, que provocó severas afectaciones en materia de vivienda, el gobierno capitalino impulsó un programa para apoyar a las familias damnificadas mediante la construcción de 700 departamentos. Estos inmuebles serían comercializados mediante subastas, dando prioridad de compra a los afectados por el desastre natural.
Sin embargo, la estrategia no tuvo la respuesta esperada: solo 30 inmuebles fueron vendidos. De acuerdo con Muñoz, 135 departamentos fueron entregados como pago a las constructoras del proyecto, y los 535 restantes se integrarán al Programa de Vivienda Pública en Renta.
Aunque el INVI aún no ha determinado las tarifas oficiales, autoridades de la Ciudad de México estiman que los precios podrían rondar los 7,500 pesos mensuales, una cifra que busca mantener los alquileres en niveles accesibles para la población trabajadora. Se prevé que los lineamientos finales del programa sean publicados en las próximas semanas.
El Programa de Vivienda Pública en Renta representa solo una parte del proyecto de vivienda social del gobierno capitalino. La Jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, ha señalado que su administración contempla la construcción y rehabilitación de 200,000 inmuebles, los cuales podrán ser adquiridos o rentados a precios justos, en alineación con el programa federal Vivienda para el Bienestar.
Con estas acciones, el gobierno de la CDMX busca atender el déficit habitacional y ofrecer alternativas de vivienda digna y asequible, especialmente para las familias que fueron afectadas por el sismo de 2017 y aquellas que enfrentan dificultades para acceder al mercado inmobiliario tradicional.
